Hay una edad a la que uno desearía tener un Chewy.
Levantarte temprano y encontrarlo a los pies de la cama. Que desayunase contigo llenándolo todo de migas y manchas de colacao. Dirigirse a la escuela sobre sus hombros. Chulear entre los compañeros, intimidar a los matones, invitar a la chica más guapa a subirse, que los maestros se acercasen a admirarte. Que ese día el recreo fuese más largo y se jugase a la Guerra de las Galaxias y tu fueses Han Solo. Y que cuando menos lo esperases apareciese una nave y te llevase muy lejos, a otro planeta con muchas aventuras por pasar, un conflicto intergaláctico con muchos disparos, saltos y espadas laser.
Al final te conformas con unos cromos, unas historietas, unos dibujos que tu hiciste y un perrito pequeñito que se le parece. El resto lo hace la imaginación.
4 comentarios:
Perdón, ¿Qué es un Chewi?
¿Se mastica?
Me ha gustado cómo lo has escrito.
Yo tengo un amigo que tenía una novia, que si no era un chewi poco le faltaba. Hasta se lecogía cariño a la jodía.
Como le toquéis mucho los huevos va a ponerse a arrancar brazos, aviso.
mini, mini, chewi... ¿mini, mini chewi? (entonación de llamada mientras se busca por toda la casa)
A ver si la escucháis: Mini, mini chewi...
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