Es uno de mis pintores favoritos. Peter Brueghel el Viejo, (1520-1569). Este extraordinario artista flamenco retrató como nadie la vida cotidiana de las clases populares de su época, con imaginación e ironía. Creo que en ciertos aspectos podría ser considerado un antecesor de los humoristas gráficos actuales.
Siendo muy niño descubrí su obra y desde entonces me gusta bucear en sus cuadros, es como ver el mundo desde fuera, desde muy arriba, y descubrir lo ridículos que somos y locos que estamos.
El que he colgado es uno que siempre me ha hecho reflexionar. El ejército de la Muerte avanza imparable asolando todo a su paso. Toda resistencia es inútil. ¡Qué vana es la existencia humana! ¡Qué gran teatro es el Mundo!
2 comentarios:
Es curioso: cuando me encuentro con este tipo de imágenes, yo me veo dentro. Generalmente, en las carnes del más pringado entre los caídos.
Excepción hecha de ese detalle, coincido contigo: el tipo era grande. Me pregunto por qué nadie pinta hoy en día escenas similares. Será porque las hay de sobra en los telediarios, o porque los artistas andan muy ocupados cocinando gapos como ese que aparecía en un chiste tuyo...
Yo creo, mirando y remirando el blog, (y conociéndote), que somos ambos muy macabros, Alex. O muy españoles, es decir muy del medievo del Apocalipsis o del Barroco de Trento. Tenebristas y truculentos. Eso o que hemos mamado mucho al Chumy Chúmez.
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