Hubo un tiempo en el que los osos no regentaban teterías, gastaban gafas o vestían con sombrero y corbata. Una época en la que la tierra asturiana era reducto de indomables cristianos. Sujetos que con pocos medios pero mucho coraje y regusto hacían frente al invasor islámico. Uno de sus reyes fue Favila. De este rey sabemos muy poco, tan sólo que se lo comió un oso. Por aquel entonces los plantígrados no debían de seguir dieta alguna y no le hacían ascos a nada, y menos a un rey cristiano, astur o visigodo.
Rey Favila, rey Favila,
Sólo dos años reinó.
En tierra de los cristianos,
Muy pronto la muerte halló.
La garra de un feroz oso
el ánima le arrebató.
2 comentarios:
Supongo que este oso no era Mitrofan
Que va. Este era un antepasado suyo republicano.
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