Mariano Pino alias Budy era el rey del swing en el garito más popular del barrio. Tenía tanta magia en los pies como aguijón las abejas. Nunca encontró un rival de su talla ni una chica a su altura. Un día descubrió que su mejor pareja era su propia sombra. Desde entonces taconea en las afueras, sobre la acera, al amparo de un buen muro, las noches de luna llena.
3 comentarios:
Entonces anoche seguramente se hinchó de bailar.
No se si sea un mensaje a ala conciencia pero creo que lo que lo hizo grande lo alwjo de todo
Un solitario nato.
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