"Y he de confesar, en efecto, por dolorosa que la confesión sea, que nunca, en los días de la fe ingenua de mi mocedad, me hicieron temblar las descripciones, por truculentas que fuesen, de las torturas del infierno, y sentí siempre ser la nada mucho más aterradora que él."
Del Sentimiento Trágico de la Vida, Miguel de Unamuno.
¡Qué bueno el Unamuno! Yo lo ví una vez contra el Numancia y menudo partido. Hizo un jak tric, dos asistencias y sacó de banda a una mano. Vamos, que podría escribir un libro también si quisiera. Besos y muchas felicidades por vuestra paternidad, colegui.
ResponderEliminar¡Magnífico fragmento!
ResponderEliminarSaludos.
Cuchi, ¡enhorabuena, Juan!
ResponderEliminarMe parece estupenda estaimagen,que gran ilustrador eres!!!
ResponderEliminarNada como una inyección de amigos para seguir dibujando con entusiasmo.
ResponderEliminarEsta ilustración y la anterior, en paño de oro, que seguro que te las piden para alguna publicación ;)
ResponderEliminarQué bonito es soñar.
ResponderEliminarMiguel de Unamano,también conocido como el manco de Lepanto. Me encanta.
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